San Cristobal Town Hall & Cultural Center

The New of the San Cristóbal Town Hall and its associated Cultural Center are inserted within an urban fabric made up of a succession of representative public spaces and facilities, becoming an institutional and recreational heart for the town.

The proposal consolidates a contained and lined public space with an urban front facing the avenue, which surrounds and highlights the existing property of cultural interest (which becomes a cultural facility). In the same way, towards the north it incorporates into the fabric of a park, it is perforated and made permeable, responding to a distribution closer to that of loose objects and equipment in the middle of a green context. In this way, the building fronts presented towards the city are extended to the maximum, allowing all the institutions to have independent accesses and the public space to be filled with activity and life.

The concrete porticoes, which make up the facade of the tower and the stoa that define the basement, generate a continuous, classic rhythm, with a sober and timeless image. In contrast, the auditorium offers a reinterpretation of this rhythm based on prefabricated curved elements, which differentiate it from the rest of the complex, highlighting it as the hinge that articulates the recreational space contained in the park with the dignified and institutional space offered by the Civic Square of San Cristobal.

La Nueva Sede de la Alcaldía Local de San Cristóbal y su Centro Cultural asociado se insertan dentro de un tejido conformado por una sucesión de equipamientos y espacios públicos representativos, convirtiéndose en un corazón institucional y de esparcimiento para la localidad.

La propuesta consolida un espacio público contenido y paramentado con frente urbano hacia la avenida, el cual envuelve y destaca el inmueble de interés cultural existente (que se convierte en un equipamiento cultural). De la misma manera, hacia el norte se incorpora al tejido de un parque, se perfora y se hace permeable, respondiendo a una distribución más cercana a la de objetos y equipamientos sueltos en medio de un contexto verde. De esta manera se extienden al máximo las frontalidades que presenta el edificio hacia la ciudad, permitiendo que todas las instituciones tengan accesos independientes y el espacio público se llene de actividad y vida.

Los pórticos de concreto, que conforman la fachada de la torre y la stoa que define el basamento, generan un ritmo continuo, clásico, con una imagen sobria y atemporal. En contraste, el auditorio ofrece una reinterpretación de este ritmo a partir de elementos prefabricados curvos, los cuales lo diferencian del resto del conjunto, destacándolo como la rótula que articula el espacio lúdico contenido en el parque con el espacio digno e institucional que ofrece la plaza Cívica de San Cristóbal.