+ aRE Arquitectura en Estudio
FINALIST
2021 Public Competition
The building is posed as a functional machine. A pure and clear prism that contrasts with the green of the vegetation around it. Its internal distribution fully responds to the needs of use of the building, proposing a compact service spine at the back that completely frees the areas for laboratories, offering the possibility of being flexible and transforming if required in the future.
The prism is hollowed in its most visible corner -the access-, and allows nature to permeate it and penetrate the interior of the spaces. Thus the greenery and vegetation unfolds through the different levels of the building, generating a leafy and exuberant access patio that dialogues with the environment and at the same time breaks the depth of the volume to allow the entry of natural light and enhance cross ventilation into spaces. The patio functions as the heart of the building, giving access to the double height lobby and offering close views populated with green and nature to the workspaces. They also look at the common areas of the building and its outdoor terrace, offering a playful and healthy area to its inhabitants.
The facade, with floor-to-ceiling windows, allows a generous entrance of natural light, filtered through a white aluminum lattice, which is made more or less dense, strictly following the bioclimatic requirements of the environment. The roof consists of a succession of skylights that incorporate even more natural light into the spaces, support a series of photovoltaic panels and also offer the possibility of discharging the air in the manner of a thermosyphon, guaranteeing healthy and healthy work spaces.
El edificio se plantea como una máquina funcional. Un prisma puro y limpio que contrasta con el verde de la vegetación a su alrededor. Su distribución interna responde completamente a las necesidades de uso del edificio, planteando una barra de servicios compacta en la parte posterior que libera por completo las áreas destinadas a los laboratorios, ofreciendo la posibilidad de flexibilizarse y transformarse en caso de ser requerido en el futuro.
El prisma se horada en su esquina más visible -el acceso-, y permite que la naturaleza lo permee y penetre al interior de los espacios. Se despliega así el verde y la vegetación a través de los distintos niveles del edificio, generando un patio de acceso frondoso y exuberante que dialoga con el entorno y que a la vez rompe la profundidad del volumen para permitir la entrada de la luz natural y potenciar la ventilación cruzada al interior de los espacios. El patio funciona como el corazón del edificio, dando acceso al lobby de doble altura y ofreciendo vistas cercanas pobladas de verde y naturaleza a los espacios de trabajo. Hacia él miran también las zonas comunes del edificio y su terraza exterior, ofreciendo un área lúdica y saludable a sus habitantes.
La fachada, con ventanales de suelo a techo, permite una generosa entrada de luz natural, tamizada a través de una celosía blanca en aluminio, la cual se hace más o menos densa siguiendo estrictamente los requerimientos bioclimáticos del entorno. La cubierta plantea una sucesión de tragaluces que incorporan aún más luz natural a los espacios, dan soporte a una serie de paneles fotovoltaicos y ofrecen también la posibilidad de descargar el aire a la manera de un termosifón, garantizando espacios de trabajo sanos y saludables.
TEAM: Patricia Hidalgo, Daniel Loyola, Christ Bullon, Tiffany Guzman, | MEPS: Juan Carlos Heredia, Prisma Ingenieros